Colgar y pintar en o Grau (ver aquí). Más exactamente, en la Cueva o Grau (ver aquí). Ambos también los hemos comentado aquí.
Ya en la ficha de la cueva (ver más arriba) señalábamos dos palos donde los pastores colgaban antaño el morral y sus cosas, lejos del suelo y de los animales. Los hemos encontrado muchas otras veces en otros abrigos con idéntico uso ganadero. Esta vez hemos visto en otra grieta de la cueva los restos, rotos y escondidos en su interior, de otros cuatro palos:
Sin embargo, todos estos pastores que tanto frecuentaron este alargado abrigo, no fueron los primeros. Disimulados y solitarios, unos tracitos rojos nos enseñan que hace 4000-7000 años ya se vivía por aquí.
Anabel muestra esta vez la situación de los trazos. |
El pasado 15 de abril de 2023, Paloma Lanau y Mario Gisbert los encontraron en una visita por la zona (recordemos que hay otra pintura abajo en el río, en la zona de as Chuderías: ver aquí).
Estos se encuentran fragmentados por culpa de los desconchados y las calcificaciones. Una vez más poco queda de lo que debió haber:
Trazos rojos ¿correspondientes al arte esquemático? |
La roca del acantilado es rica en manchas rojas de origen natural pero las que nos ocupan se diferencian de aquellas:
De camino la roca nos ilustra, como tantas otras veces, con su propio lenguaje:
A la entrada de la misma Cueva o Grau, un lienzo de roca se pinta, esta vez sí, con la naturaleza ferrosa del acantilado. |
Y tanto en a Garganta Baja como por encima de la Cueva o Grau, la propia vegetación suma su propio e igual precioso vestido.
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