Dejamos hoy constancia de que la borda-pajar de la Era Manuel se adentra definitivamente en terrenos ya propios solo de la memoria.
En la entrada de 4 de marzo de 2014 la mostramos, vimos algunas de sus peculiaridades e indicamos su situación (ver aquí).
En fin, como es normal en todas estas construcciones, caen y se desmoronan con las inclemencias del tiempo y la falta de uso (de reparación por lo tanto).
Así la encontraremos en este momento:
Y de esta otra manera la fotografiamos aquella otra vez:
No hay comentarios:
Publicar un comentario